¿Qué denunciamos las Brigadas Vecinales de Observación de Derechos Humanos?
Denunciamos los controles de frontera que existen en todo el Estado español: policías apostados en puntos estratégicos y de uso cotidiano (estaciones de metro, intercambiadores, autobuses, plazas, locutorios y puertas de colegios), acosando, pidiendo papeles, deteniendo a algun@s vecin@s en función de su apariencia.
Mientras el Estado incentiva la circulación de los capitales, las redadas policiales criminalizan la libertad de movimiento de las personas procedentes de países de la periferia económica, negándonos el derecho que tod@s tenemos a decidir nuestro lugar de residencia y de trabajo. Sea cual sea el motivo de la migración, las personas venidas de otros lugares sufren maniobras de segregación, persecución, encierro y expulsión, siendo tratadas como sospechosas y criminales.
Quienes no tienen autorización de residencia y trabajo porque se les imponen unos requisitos prácticamente imposibles de cumplir, son considerad@s únicamente mano de obra explotable y no se reconoce su condición de personas. La falta de autorización no es un delito sino una mera falta administrativa equiparable a una multa de tráfico. Sin embargo se ha llegado a legalizar su internamiento en un Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) hasta por 60 días.
La justicia más elemental impide realizar acciones discriminatorias en función de criterios étnicos. La Ley española y los Convenios Internacionales así lo reconocen, pese a lo cual el Ministerio del Interior, con el acuerdo de la Unión Europea, las efectúa constantemente.
Los controles de identidad son la expresión más cruda y extrema del control del espacio público, impiden relaciones en igualdad que creen prácticas de confianza, el uso libre de las calles y cualquier iniciativa social naciente entre gentes de cualquier nacionalidad. Extienden el miedo, el racismo y la desconfianza en nuestros barrios: son los controles los que generan una inseguridad de la que ninguna cámara de vigilancia puede protegernos.
He llegado a vuestra pagina de casualidad leyendo una noticia en la web de la SER. Me parece que haceis un trabajo increible y muy necesario, y quiero felicitaros por ello (la verdad me ha emocionado saber de vuestra iniciativa).
No vivo en España (aunque soy española) asi que no me puedo unir a vosotros. Si hay alguna manera de contribuir desde el extranjero poneos en contacto conmigo (teneis mi direccion email).
Hola Claudia,
Muchas gracias por tus palabras. La manera más obvia de participar en Brigadas es salir con nostras a la calle pero hay muchas cosas que se pueden hacer. Lo pensaremos y te contestaremos por email lo antes posible.
¡Gracias por contactarnos! 🙂
Por que no denunciais el que gente que lleva toda la vida trabajando tenga que pedir comida para mantener a su familia, o los desahucios de viviendas, o que inmigrantes sin trabajo tengan lujos como telefonos de ultima generacion con tarifas que ni yo puedo tener, vivienda pagada por el estado y ayudas qeu superan mi salario
Tambien deberias conseguir que los extranjeros acaten los deberes al igual que piden derechos, que parece que eso se les ha olvidado a muchos.Tengo compañeros de trabajo extranjeros, a esos si les apoyo, pero a los que vienen a chupar de las ayudas sociales mejor se quedaban en su pais.
Hola. Enhorabuena por vuestra labor, muy grande. Me voy a contener para no contestar al tal Jaime, pero me cuesta.
A mi me gustaría colaborar, pero vivo en Barcelona. ¿Sabéis si hay alguna iniciativa similar aquí?
Gracias!
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Felicito la iniciativa antirrepresiva, vivo en la provincia de Málaga, algo por aquí similar? Como puedo colaborar?
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